DE MI COLECCIÓN “REVISIÓN CULTURAL” (DESDE / SINCE 1978)
OPINÓ EL CARDENAL DE BARCELONA Narcís Jubany:
”MUY INTERESANTE Y DIGNO DE LA MEJOR ATENCIÓN”
Venerar las reliquias y poder deambular ordenadamente a su alrededor, en el siglo XII justificaba la construcción de un templo romànico. El primer lugar donde se realizó esta experiencia en Cataluña fue en el monumental monasterio de San Pedro de Roda (Costa Brava - NE. de España), el mismo donde defiendo que se guardaron las reliquias de san Pedro apóstol el año 610. Se erigió con el poder de la fe, siendo la razón lo que evita que se desplome.
Cuanto quede de las primeras reliquias de la cristiandad, está en Cataluña, porque los restos que no se encuentren tirados por las pendientes del valle de la Santa Creu en la sierra Verdera. Aunque parezca increíble, es largo de explicar que las reliquias del apóstol san Pedro fueron encontradas en el N.E. de España, siendo por ello que lo sinteticé en un libro. Actualmente se encuentran en una vitrina de la sala nº 1 del Museu d'Art de Gerona, que está adjunto a la catedral.
En mi investigación del hallazgo de las únicas reliquias de san Pedro Apóstol, empieza avisando de que sucedió accidentalmente cuando el suelo se hundió bajo los pies de unos ladrones de mármoles muy cercanos al lugar donde había estado el altar mayor de la iglesia del gran monasterio de Sant Pere de Roda. Se habían alejado de Roma el año 610 y permanecieron ocultas exactamente doce siglos.
Mi obra fue auto-editada el año 1.989, y desde la primera página hice constar la opinión que mi labor mereció al entonces cardenal Mns. Narcís Jubany, de Barcelona, quien después de unos meses transcurridos desde cuando se la presenté personalmente en 1.976, él tuvo la amabilidad, y el coraje, de contestar por escrito la opinión de que mi labor la consideraba:
MUY INTERESANTE Y DIGNO DE LA MEJOR ATENCIÓN
Hay que recordar que el dicho cardenal de Barcelona, hace décadas fallecido, por aquel entonces pudo haber sido Papa de Roma,... es decir, que realmente se "comprometió" mucho al comunicarme su parecer por escrito.
PRESENTÉ MI LIBRO INCLUYENDO LA INVESTIGACIÓN OFICIAL DEL VATICANO TITULADA "ESPLORAZIONI", REFERENTE A LA EXCAVACIÓN DEL SUBSUELO DE LA BASÍLICA DE SAN PEDRO DEL VATICANO. SE TRATA DE UN GRANDIOSO LIBRO DE EDICION MUY LIMITADA, EL CUAL, GRACIAS A MI AUTO-EDICIÓN DE 1987, UN DÍA U OTRO SERÁ MÁS DIVULGADA A NIVEL POPULAR.
No obstante, mi muy esforzada contribución para enriquecer el patrimonio de mi país y revelando la verdad al mundo entero, quedó diluida. Mi único consuelo fue, por lo tanto, la opinión escrita por dicho cardenal de Barcelona. Mns. Narcís. Jubany no opinó tan evasivamente como los arqueólógos que poco después de publicar mi libro excavaron el dicho monasterio, para quienes yo siempre fui un intruso al que odiar;...y vaya si me odiaron!
En mi descargo cuenta que también el que yo repasé la excavación oficial del subsuelo justo debajo del altar mayor de San Pedro del Vaticano, así como las circunstancias y conducta de los invasores de Roma, e incluso la vida de todos los Papas implicados con el hallazgo de la tumba de san Pedro apóstol. También hice público mi estudio concienzudo de la grafología del "altar portatil", el cual viajó dentro del "maletín-relicario", etc.. Puedo afirmar que yo había compensando con mi mucho esfuerzo el carecer de determinado título especializado. Recordaré que incluso la ciencia empírica necesita tener mucha humildad al presentar sus certezas. Un buen científico recordará que, al fin, como un buen filósofo, él también busca la verdad.
Yo soy vocacionalmente investigador de cuanto ignoro, o de aquello que humanísticamente me sorprenda. Dicho sea también, que soy una persona religiosa en un termino medio, quiero suponer que como cualquier lector de estas líneas, aunque por el tema que presento lo pueda parecer mucho más. También podría suceder que, puesto que hice mi mayor esfuerzo, el cielo me concediese finalmente el éxito, reconociendo que mi tiempo no fue malgastado.
Haciendo un breve resumen de cómo comenzó mi interés en esta investigación diré que leyendo un viejo volumen titulado "Anuario Eclesiático de la Iglesia Española del año 1.917", se incluí un artículo con muchas fotos, al leer el cual me llevé la mayor sorpresa.
Me tengo por una persona culturalmente (al escribir cultura, quiero decir de élite) muy bien informada, y era para mi ego imperdonable ignorar nada menos que un tesoro artístico encontrado en las ruinas del grandioso monasterio catalán de Sant Pere de Roda (en el cabo de Creus -Gerona), por más que entonces estaba abandonado a su suerte desde hacía muchos siglos.
ALTAR PORTATIL, CON UNA PIEDRA PIZARRA INCRUSTADA EN SU CENTRO, SIMBOLIZANDO LA FE DE SAN PEDRO APÓSTOL
LOTE: MALETÍN-RELICARIO
En mi libro, incluí también el descifrado de los símbolos que el papa Gregorio I grabó sobre los huesos del exterior de la "arqueta-relicario" (la cual en 1.910 fue muy ingénuamente restaurada). Él fue quien primero impuso en exclusiva los nombres del santoral católico para los bautizados, puesto que antes había sido sólo una recomendación.
Dicho lote de relicarios diminutos y una ara portatil muy artística en 1.917 habían sido presentados a la erudición eclesiástica por un ilustre sacerdote llamado Mn. Gudiol Cunill, comisionado por su obispo para estudiar el tal hallazgo en la entonces tan inaccesible costa N.E. de aquella comarca de los Pirineos marítimos.
El voluminoso DIZIONARIO DI ABREVIETURE LATINE ITALIANE, (Ed. en Milán 1187) la letra G se escribía como la Ç del nombre Elimburga, que, junto al de José, se incluyen en el ara portatil de Sant Pere de Roda. Tal fue su diseño normal en el siglo VII. (y se mantuvo hasta el siglo X).
Del mismo periodo es la ampulosa letra M del nombre de la misteriosa donante Elimburga, con diseño de corazón convencional. Durante todo el siglo V se escribió como nuestra actual letra eme minúscula, pero luego el trazo interior de la M se hizo descender hasta la base de los demás arcos de dicha letra.
La cruz metálica que incluye el mismo lote de relicarios, aún es más concluyente para fechar el lote descubierto enterrado a los tiempos del pontífice Gregorio I. La llamaron "encolpium" y se hicieron así desde la segunda mitad del siglo VI y hasta inicios del VII. Hay otro relicario metálico con repujados semejantes en el Tesoro del Doumo en la ciudad de Monza (Italia).
LOS MISTERIOSOS DONANTES DEL ALTAR
A doña Elimburga aún no la he podido identificar, pero desde el principio me propuse tres vías especulativas de investigación. Expongo solo la primera, referente a los gobernantes visigodos de la Península Ibérica, y dejaré las demás para cuando me ocupe de la dinastía europea llamada Rex-Deus”.
Elimburga sería una noble de la corte del rey visigodo Recaredo. Su nombre nos llegó latinizada sin la letra "H" inicial, i el nombre "Iosve", no se escribió en hebreo que es "Iosef".
Por entonces yo sospechaba de cuato reyes merovingios que practicaron la poligamia:
Chariberto I, Chilperico, Dagoberto I y el más famoso rey Clotario I, éste último había estado casado al mismo tiempo con Aregunda e Ingunda. Cuando ya tenía otras tres esposas decidió raptar a la que pasó a los altares como santa Radegunda a pesar de que tenía una hija del derrotado rey de los Turingios.
El rey Clotario I raptó a Radegunda del convento, se casó con ella a condición de que seguiría siendo monja además de reina, pero cuando Clotario mató al hermano de Radegunda, ésta se separó de la corte para vivir como religiosa.
Durante años yo pensé que dicha regia estirpe pudo haber sido la que habrían regalado a un pontífice romano del siglo VI, o de comienzos del VII, un ara con los nombres José y Elimburga especificando que "la hicieron hacer".
Chariberto I, Chilperico, Dagoberto I y el más famoso rey Clotario I, éste último había estado casado al mismo tiempo con Aregunda e Ingunda. Cuando ya tenía otras tres esposas decidió raptar a la que pasó a los altares como santa Radegunda a pesar de que tenía una hija del derrotado rey de los Turingios.
El rey Clotario I raptó a Radegunda del convento, se casó con ella a condición de que seguiría siendo monja además de reina, pero cuando Clotario mató al hermano de Radegunda, ésta se separó de la corte para vivir como religiosa.
Durante años yo pensé que dicha regia estirpe pudo haber sido la que habrían regalado a un pontífice romano del siglo VI, o de comienzos del VII, un ara con los nombres José y Elimburga especificando que "la hicieron hacer".
Otra exigencia de mi investigación sería encontrar un motivo histórico tan especial como para celebrarlo enviándole un altar como presente al Papa de Roma de turno. Tal acontecimiento, apoyado por el arte visigotico del altar con su nombre escrito, sólo lo encuentro en cuando, en el III Concilio de Toledo (589), el rey Recaredo, que era arriano, se convirtió al catolicismo en una ceremonia que recuerda la hecha por el emperador Costantino en el siglo IV.
Entonces igualmente significó la libertad para los cristianos de la Península Ibérica (Incluyo un cuadro simbólico muy posterior de la ceremonia porque incluyó un símbolo muy interesante). Gregorio I el Magno, el pontífice que demostré en mi libro que fue quien personalmente arregló el lote de relicarios con huesos de san Pedro Apóstol, (se trata de mi antes comentado libro autoeditado en 1987 que estas páginas vienen a complementar), agradecido por tal conversión, envió regalos a la corte de Toledo consistentes en un relicario conteniendo: Restos de madera de la Vera Cruz, cabellos de san Juan Bautista y una llave con limaduras de las cadenas que había llevado san Pedro en la cárcel Marmetino, cerca del foro romano.
Aquella donación era una gran deferencia, ya que el Papa sólo lo concedía a príncipes muy cristianos. Podría ser que los nobles y reyes agraciados correspondiesen con otros regalos al Papa, y uno de los cuales pudo haber sido el ara portátil, cuyos nombres de los donantes quedaron en ella escritos, aunque para la Historia y la Genealogía sus personalidades se perdieron. Asií se explicaría la latinización de los dos enigmáticos nombres escritos en el altar portátil de Sant Pere de Roda (Gi.-NE. de Espña).
EL MONASTERIO DE "SANT PERE DE RODA"
Hoy resulta obvio que, a pesar de su gran erudición, Mn. Gudiol ignoraba los escritos del antiguo cronista de aquella zona de Cataluña llamado Jeroni Pujades. Éste, por ser el padre del monje superior de aquella prestigiosa comunidad, tuvo acceso a los antiguos escritos que informaban de un lote de relicarios escondido en alguna parte ignorada del dicho monasterio por cierto en las más recónditas costas del Cabo de Creus, en Gerona.
Al monasterio ampurdanés se persiste aún en llamarlo erroneamente Sant Pere de Rodes entre los eruditos del siglo XXI (la única excepción fue Joan Corominas), cuando debe llevar el nombre de Sant Pere de Roda. En todo caso sería "Rodes", que significa ruedas, en catalán vernáculo. Debajo del monasterio sigue manando una fuente que abasteció al mayor monasterio del Cabo de Creus, empleando en ello quien sabe cuantas norias (una sola ya necesita dos ruedas).
Cuando estudié los orígenes del monasterio ampurdanés Sant Pere de Roda ya advertí que se repitió la dicha influencia catalana en el otro lado del Mediterráneo, porque el topónimo RODA no podía proceder de la colonia griega Rhodes (además rodon significó allí rosa). RODA, al igual que ROTA, provienen de la rueda. Por ejemplo, junto al río Ter, en la comarca catalana de Osona, la parroquia de l'Esquerda (núcleo del pueblo Roda de Ter), la más antigua iglesia sobre vestigios ibéricos es llamada también Sant Pere de Roda,...desde el siglo XI. RODA en fin, en sitios con idénticas circunstancias se conservó bien, siendo otro ejemplo el monasterio de Santa María de Rueda, cerca de Caspe (Aragón).
Cuando estudié los orígenes del monasterio ampurdanés Sant Pere de Roda ya advertí que se repitió la dicha influencia catalana en el otro lado del Mediterráneo, porque el topónimo RODA no podía proceder de la colonia griega Rhodes (además rodon significó allí rosa). RODA, al igual que ROTA, provienen de la rueda. Por ejemplo, junto al río Ter, en la comarca catalana de Osona, la parroquia de l'Esquerda (núcleo del pueblo Roda de Ter), la más antigua iglesia sobre vestigios ibéricos es llamada también Sant Pere de Roda,...desde el siglo XI. RODA en fin, en sitios con idénticas circunstancias se conservó bien, siendo otro ejemplo el monasterio de Santa María de Rueda, cerca de Caspe (Aragón).
Vivimos el tránsito a una nueva Era donde, con ayuda de antiguas creencias má que nunca antes prevalecerá lo espiritual. El arquetipo mental acumulado durante milenios nos subyuga, sin embargo la búsqueda de la sabiduría procede de la consciencia que es superior, y al fin nuestro verdadero ser capaz de trascender lo mental. Se avecina una nueva Humanidad donde, con ayuda de antiguas creencias, más que nunca antes prevalecerá lo espiritual, y será gracias a enfocar nuestro desarrollo hacia una conciencia supranatural.
Después de mi hallazgo, además del libro-informe (del cual años antes personalmente entregué una copia ,mecanografiada al Secretario de Estado del Vaticano), con gran motivación escribí también una poética "Vida del Apóstol Pedro", evitando lo más posible referirme a detalles que tan sólo constan en decenas de evangelios apócrifos). No sólo me resultaba más fácil; lo hice a fin de reforzar la gran utilidad social que tiene la versión ortodoxa de la vida de Jesús para mantener, y aún incrementar, las buenas costumbres.
Adviértase como los luteranos prosperan socialmente más que los católicos. Lo que menos conviene a la Humanidad creo que, después de todo, es enturbiar dicha útil vía de evolución social, tan simple como equilibradora. Como sea que además nadie puede estar seguro de nada al respecto, creo que tratar de readaptar e imponer tales discrepancias neo-testamentarias sería tan traumático como pretender restablecer en el mundo occidental el calendario neolítico, de los trece meses de veintiocho días cada uno, sin dudar ni un momento que tal ciclo natural sea el que más beneficiaría nuestro organismo. Claro está que antes deberíamos procurar cómo unificar todos los calendarios existentes en el mundo, que no complicar el que consideramos el mejor de todos ellos, subdividiendo más todavía las diversas humanas posturas para controlar el tiempo.
No me considero sabio, ni erudito; soy una persona curiosa, y tan sólo estaría, altruistamente, entre aquellos anticuarios-aventureros que antaño corrían todo tipo de peligros en países exóticos (ya fuesen tras templos o tribus de bosquimanos), y los actuales arqueólogos de rígidas normas, en cuyas financiadas misiones se comportan cual músicos ante una partitura, pues a pesar de ser licenciados trabajan orquestalmente (teniéndolo todo previamente sondado, codificado, tematizado, etc.,) de forma que no les queda margen para el riesgo y menos para la imaginación. Lo que yo más les agradezco actualmente son sus bonitas virtualizaciones en 3D. Ven mis defectos, pero no los suyos.
FOTO: Mi presentacción del libro, y la escalera a los subrterráneos
LA CRIPTA DEL PRIMITIVO ESCONDITE (SANT PERE DE RODA-ALT EMPORDÀ-Gi)
Cuando investigué hace décadas el viejo monasterio de Sant Pere de Roda del Ampurdán (Gerona), tan sólo hacía diez años que la cripta debajo del altar mayor de aquella iglesia había dejado de estar tapiada. Para mi fortuna, había vuelto a hacerse accesible para los visitantes de aquellas ruinas.
AGUJERO EN ZONA DEL HALLAZGO JUNTO AL ALTAR MAYOR
Para quienes estén interesados en la posibilidad de que en el monasterio románico de Sant Pere de Roda, en Cataluña hubiese llegado realmente la Sangre-Real (sangreal, o Santo Grial) de Cristo crucificado, un líquido en un recipiente tal como se venera, y cada dia más, la Santa-Redoma en Bruges, Bélgica), informaré que hace décadas descubrí una referencia insospechada a una semejante sagrada reliquia Ampolla ligno crucis rupta) amenciona en un pergamino (Mns. 487) manuscrito de la Biblioteca de la Universidad de Barcelona. Es del siglo XI, pero se remonta al siglo VII cuando el pontífice Gregorio I Magno lo tituló "Dialogorum Libri Quatuor". En total se indexan 30 capítulos. Su cubierta y contracubierta siguen ambas forradas con piel (Mide: 25cm. x 35cm. X 5cm. de grosor).
Dicha copia de un manuscrito del Papa Gregorio I “el Magno” documentalmente proviene de la catedral de Girona, e intuyo que pudo haber estado antes en el monasterio ampurdanés de Sant Pere de Roda, por el hecho de que el lote de relicarios procedente de la cripta Confesione del Vaticano fue hallado allí antes del año 1916, que fue cuando el sacerdote Mn. Gudol Cunill las examinó. La dicha Ampolla ligno crucis rupta fue citada el año 1810, exactamente en el capítulo III del antes citado manuscrito "Dialogorum Libri Quatuor".
© RAMÓN RAMONET RIU
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